Simbolismo iconográfico

Please login for access. Login

En esta explicación también vamos a descubrir los simbolismos de dos íconos. Uno del cuarto día de la creación y otro del otro quinto día.
Primer ícono: tercer día de la creación

El Verbo (Jesucristo entes de la encarnación): Jesucristo aparece suspendido en el aire sentado sobre una esfera de color azul en distintos matices. Esta esfera representa los cielos, la morada de Dios.
Con su mano derecha bendice la creación y en su mano izquierda tiene un rollo de papel que simboliza la Palabra del Padre y el plan de la creación. Su manto es de color azul y su túnica de color rosa. El manto azul simboliza su naturaleza divina. La túnica color rosa, como ya lo explicamos en el ícono anterior, reemplaza al color rojo que se acostumbra porque aquí todavía el Hijo no se había encarnado, por lo que todavía no es verdadero hombre, que es el significado del rojo en la túnica de Cristo. El color rosa simboliza que es Hijo del Padre eterno.
La banda dorada que aparece en el brazo derecho de Jesús, parecida a una estola, en este caso simboliza que el Hijo tiene el poder para llevar a cabo la obra de la creación.
Las letras en griego que aparecen en su aureola dicen: “El que es”. Es Hijo, la Palabra que existe desde siempre, por medio del cual son hechas todas las cosas.

Los árboles, arbustos y flores: En el centro del ícono aparecen dos árboles. El árbol de la vida y el árbol del conocimiento del bien y del mal. Estos árboles recién aparecerán en el segundo relato de la creación, pero aparecen aquí para mostrar la unidad de los relatos que cuentan la misma historia desde dos perspectivas simbólicas distintas. Aparte de los árboles, también vemos flores y arbustos de otro tipo.
El árbol de la vida es el que aparece más arriba de la montaña. Es lo más santo que hay en la tierra porque es portador de la misma Vida de Dios. El que coma de ese árbol se hará como Dios, como Elohim.
El árbol de la Vida tiene dos ramas que salen del tallo. Simbolizan la doble naturaleza que tendrá Cristo para darnos la vida de Dios. Y muy veladamente estas dos ramas ya nos insinúan los dos brazos de la cruz en el que Cristo hará su sacrificio. También vemos que tiene seis ramas en la copa llenas de hojas y frutos. El seis es el número del hombre. Y esto significa que la vida de Dios nos viene por la encarnación del Hijo, es decir porque el Hijo se hizo hombre. Y también porque Adán, el primer hombre, debía pasar una prueba y comer de este árbol para tener la vida de Dios. Los frutos del árbol de la vida son 17. El número 17 es el número de la perfección espiritual.
El árbol del conocimiento del bien y del mal es el que está más abajo en la montaña. Es el árbol del que estaba prohibido comer por mandato de Dios. Tiene 5 ramas en el tallo. El 5 es el número de la ley. Comer del fruto de este árbol prohibido conllevaba para el hombre la muerte. No solamente muerte física sino más importante aún, la muerte espiritual, es decir, la pérdida de la gracia y los dones especiales que tenía. El árbol conocimiento del bien y del mal tiene seis frutos. El número seis es el número del hombre. Y significa en este caso respetar el mandato de no comer de este árbol es la prueba para el hombre antes de entrar en el descanso de Dios, es decir el séptimo día.

Aparte de los árboles también vemos flores y pequeños arbustos alrededor de los dos árboles en el centro del jardín. Estos simbolizan la belleza y la perfección con la que Dios fue ordenando su creación. También hacen alusión al jardín del Edén que va a detallarse más en el segundo relato.
Hay tres flores blancas juntas y una que está sola. Esto representa que Dios Trino y uno imprime en la creación su imagen trinitaria y unitaria para que los hombres descubriendo estas perfecciones impresas en las creaturas lleguen a él, el creador y lo alaben.
También, hay 4 flores naranjas. El cuatro es el número de la creación, del cosmos. Y esto significa en relación a las flores blancas que la imagen de Dios y sus perfecciones está en todo el cosmos.

Las aguas: En este ícono las aguas aparecen tranquilas y con un límite fijo. El Verbo, Jesucristo, las ordenó y las reunió en un solo lugar para que el caos se detenga y en su lugar haya orden.

Segundo ícono: cuartosegundo día de la creación

Jesús: nuevamente aparece con su mano derecha extendida, símbolo de su mano creadora. En la mano izquierda porta un rollo de papel cuyo simbolismo ya explicamos. El simbolismo de sus vestiduras es igual al ícono anterior.

Los ángeles: arriba, en la bóveda del cielo, aparecen los serafines alabando a Dios. Ellos cantan la creación que está siendo hecha. Sabemos que son Serafines porque tienen 6 alas y son azules. Están en la bodega del cielo porque los ángeles son los encargados de que se mantenga el orden en los planetas y astros.
Abajo, en la tierra, aparecen tres ángeles colaborando con el Verbo en su creación. Son tres porque la creación está siendo hecha por la Trinidad. Tienen vestiduras verdes, naranja y azul. El verde simboliza aquí la vida que se está desarrollando en tierra. El naranja simboliza la relación íntima que tienen los ángeles con Dios y el azul simboliza la naturaleza angélica, es decir, que son espíritus puros.

El sol, la luna y las estrellas: aparecen los dos astros principales es decir, el sol que es símbolo de Cristo y la luna es símbolo de la Virgen María. Tanto el sol como la luna reciben de Dios el don de participar en su naturaleza luminosa. Son los encargados de alumbrar el templo cósmico de Dios, es decir, la tierra. Y a su vez están encargados de marcar los tiempos de las fiestas litúrgicas. La bóveda del cielo a su vez se llena con muchas de estrellas que simbolizan a los ángeles y los santos.